Antes de los comicios más grandes de la última década, los de 2021, el partido en el poder deberá enfrentar una guerra dura y abierta entre los grupos o tribus que se pelean la dirigencia nacional y, con ello, las multimillonarias prerrogativas del próximo año y la definición de miles de candidaturas (que significan poder y dinero), además del fortalecimiento de quien pueda ser el candidato presidencial en 2024.

Un análisis del periodista Zedryk Raziel, del portal Animal Político, señala a tres grupos de poder que están buscando afanosamente hacerse con la dirigencia nacional en las próximas semanas, en uno de los cuales, el bloque Luján-Ramírez Cuéllar, ubica al gobernador Cuitláhuac García Jiménez.

Este bloque impulsa, según el periodista, una fórmula donde se conjugan la innegable experiencia política de un hombre que se acerca a los 90 años, Porfirio Muñoz Ledo, para la Presidencia de Morena, con la enjundia y juventud (no exenta de capacidad discursiva y polémica) de la senadora Citlalli Hernández, de apenas 30 años, en la Secretaría General.

En un proceso de elección que se realizará mediante encuesta, que deberá organizar y vigilar el Instituto Nacional Electoral (INE) por orden del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), participarán tres empresas demoscópicas, definidas este 7 de septiembre: BGC, Ulises Beltrán y Asociados SC, Covarrubias y Asociados SC y Parametría SA de CV.

En efecto, el 20 de agosto pasado el Tribunal informó en un comunicado que decidió que el INE “se deberá encargar de la realización de la encuesta nacional abierta a la militancia y simpatizantes del partido” para la elección interna de Morena.

Los lineamientos y calendario a seguir para la renovación de la presidencia y la secretaría general del Comité Ejecutivo Nacional a través de una encuesta nacional, se llevará a cabo del 26 de septiembre al 2 de octubre

Aunque el método de encuesta no está contemplado en los documentos internos del partido en el poder para la elección de sus dirigentes nacionales, y ello ha llevado a acusaciones por parte del actual presidente interino Alfonso Ramírez Cuéllar como un asalto a la vida interna del partido, el consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova, puso los puntos sobre las ies:

“El INE no pidió ni quiso participar en este procedimiento, pero cumplirá el mandato del Tribunal Electoral, porque en esta institución siempre se ha respetado el mandato de la ley y acatado las sentencias de un Tribunal”.

Un año antes, el jueves 29 de agosto de 2019,  en una reunión con legisladores, el presidente Andrés Manuel López Obrador les sugirió que podían hacer uso de una encuesta para solucionar el relevo de la dirigencia nacional del partido que él fundó y al que, conforme se den las cosas, podría renunciar.

Aunque no le hicieron caso y debió ser el Tribunal Electoral federal el que impusiera este método, López Obrador les dijo: “Lo de la encuesta es, considero, lo más recomendable, pero esta es una opinión, no vuelvo a hablar del tema".

Y es que, señores, los de Morena parecen sumamente democráticos: para la Presidencia se inscribieron ¡51 candidatos!, mientras que para la Secretaría General ¡son 54! En total, 105 aspirantes cuya lista, en el curso del proceso, seguramente será disminuida hasta dejar cinco o seis por cargo.

Los grupos que se pelean el partido del presidente

Según Zedryk Raziel, son tres bloques los que pelean encarnizadamente la dirigencia nacional de Morena: el bloque Luján-Ramírez Cuéllar, que postula a Porfirio Muñoz Ledo; el bloque Delgado-Monreal, que postula a Mario Delgado, y el bloque Polevnsky que lleva como estandarte a Yeidckol Polevnsky.

Citando fuentes de la dirigencia, Raziel señala que el primer bloque lo encabezan Bertha Luján y Alfonso Ramírez Cuéllar, quienes “negociaron la postulación del diputado Porfirio Muñoz Ledo a la presidencia y de la senadora Citlalli Hernández a la secretaría general como si fueran una “fórmula”. Previamente hubo acercamientos con el senador Martí Batres e incluso con César Yáñez, exvocero de López Obrador y hoy coordinador general de Política y Gobierno de la Presidencia, también allegados a este bloque”.

Este grupo tiene el respaldo de la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, una presidenciable en 2024, y del Consejero político de la Presidencia de la República, Julio Scherer Ibarra. Sin embargo, a ellos se han sumado otros funcionarios como Gabriel García, coordinador general de Programas Integrales de Desarrollo y jefe de los superdelegados, y Cuitláhuac García, gobernador de Veracruz; también diputados como Pablo Gómez, Aleida Alavez y el propio Muñoz Ledo.

En el segundo bloque, el líder de la bancada morenista en la Cámara de Diputados, Mario Delgado, habría desplegado una estructura electoral hacia los estados a través de una organización de diputados de Morena creada expresamente para apoyar su candidatura: la Asociación Nacional de Legisladores por la Cuarta Transformación A.C.

El jefe de los morenistas en San Lázaro se postuló a la presidencia del partido junto con Donají Alba Arroyo, secretaria de Organización de Morena en la CDMX, que a su vez es identificada como operadora de Ricardo Monreal, coordinador de los senadores. “La mancuerna entre Delgado-Monreal se concretó este año, cuando ambos, de manera conjunta, operaron para que en el Congreso Nacional del 26 de enero hubiera los votos necesarios para destituir a Yeidckol Polevnsky de la dirigencia”.

Y aquí aparece otro posible presidenciable para 2024, el Secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard. Hay que recordar que Delgado fue Secretario de Finanzas y de Educación durante el sexenio del Canciller como Jefe de Gobierno de la CDMX. Y acá aparece otro gobernador, Rutilio Escandón, de Chiapas, gracias a Ricardo Monreal.

Y por último, el bloque Polevnsky. Según el periodista de Animal Político, “la estructura de apoyo de Yeidckol Polevnsky ha sido paulatinamente desmantelada por Ramírez Cuéllar, quien, desde la dirigencia del partido, ha revertido los nombramientos que hizo su antecesora en los Comités Directivos en las entidades federativas.

Sin embargo, la exsecretaria general busca restablecer su fuerza en los estados mediante alianzas con senadores morenistas que respaldan su candidatura, como los de Coahuila, Guanajuato, Tamaulipas, Zacatecas y Quintana Roo, además de los gobernadores Miguel Barbosa y Jaime Bonilla, “a quienes acompañó en sus candidaturas a lo largo de todo el proceso electoral local de Puebla y Baja California de 2019”. Polevnsky iría en fórmula con Carol Arriaga, quien fue Secretaria de Mujeres del CEN.

Otro periodista salvajemente asesinado en Veracruz

Los atentados sufridos por periodistas en Veracruz no dejan de ser noticia a pesar de las ampulosas declaraciones del gobernador Cuitláhuac García Jiménez de que no habrá impunidad en los homicidios, hasta este miércoles, de tres colegas que han perdido la vida aparentemente por órdenes de grupos criminales y autoridades locales.

Ahora ha tocado el turno al reportero del diario El Mundo de Córdoba, Julio Valdivia Rodríguez, quien fue localizado decapitado y con visibles huellas de violencia sobre las vías del ferrocarril a la altura de la congregación Motzorongo, mientras que a un costado fue localizada su motocicleta de color azul. Deja en la orfandad a dos hijas.

Sus compañeros de la región realizarán este jueves una manifestación pacífica frente al palacio municipal de Córdoba, y harán un llamado a la Fiscalía del Estado, al Congreso del Estado y a la Comisión Estatal de Apoyo y Protección de Periodistas (CEAPP) para que se actúe de inmediato para brindar justicia a la familia del colega asesinado y del gremio.

Este tercer acto contra un comunicador ocurre en un estado que es considerado el territorio más peligroso en América Latina para el ejercicio del periodismo, en un país que muestra una mayor letalidad de periodistas que países en guerra en el mundo y que tiene al Presidente de la República como uno de los principales promotores de violencia entre sus seguidores contra cualquier manifestación crítica de periodistas.

En la noche del 2 de agosto de 2019, Celestino Ruíz Vázquez, reportero de Gráfico de Xalapa, fue asesinado en su casa, en la comunidad de La Bocanita, en el municipio de Actopan, por sicarios aparentemente contratados por el entonces alcalde de Actopan, quien ya había amenazado al periodista.

Al mediodía del día siguiente, en su cuenta de Twitter, el gobernador Cuitláhuac García publicó al respecto del primer asesinato de un periodista: “Condenamos el cobarde asesinato del corresponsal de un medio local, Jorge Ruiz. Daremos con los responsables; su asesinato no quedará impune. Desde hace horas seguimos en el operativo coordinado para lograr la captura de los culpables”.

La segunda fue la periodista María Elena Ferral Hernández, asesinada el 30 de marzo. La corresponsal del Diario de Xalapa y directora del medio Quinto Poder, falleció la noche del 30 de marzo después de que, por la tarde de ese día, dos sujetos desconocidos le dispararan en el centro de Papantla, a pocos metros del Palacio Municipal.

La periodista salía de una oficina notarial cuando le dispararon con un arma 45 milímetros. De acuerdo con un testimonio anónimo, la esperaban cerca de su auto a bordo de una motocicleta. Los disparos la hirieron en el abdomen, un glúteo, el hígado y los pulmones. Posteriormente, fue trasladada al Hospital Civil de Papantla, donde horas más tarde perdió la vida.

La entonces encargada de la Fiscalía General del Estado (FGE), Verónica Hernández Giadáns, confirmó el 8 de mayo la detención de seis de las once personas imputadas por el asesinato de María Elena Ferral. Entre los detenidos mencionó al reportero de La Opinión de Poza Rica, José Cárdenas, el regidor del PVEM, Efraín Rivera, y el exmarido de la periodista.

El tercer homicidio de un comunicador en la era morenista ocurrió este miércoles. Descanse en paz Julio Valdivia.

Frases sin disfraces

“La derrota tiene una dignidad que la victoria no conoce”. Jorge Luis Borges

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