Feliz Fin de Año

México está enojado y por lo consiguiente Veracruz también, un Estado que lo tiene todo pero que –lamentablemente– últimamente no ha tenido nada, un Estado que lo tiene todo pero que en los últimos gobiernos lo que menos ha tenido son funcionarios públicos comprometidos con las causas más justas y de desarrollo de sus habitantes, un Estado que lo tiene todo pero que –hay que decirlo– también tiene una sociedad que espera y exige sus derechos y voltea a otro lado cuando se habla de sus responsabilidades, un Estado que lo tiene todo pero –ante la llegada de un nuevo año– seguramente quiere algo más.

En sus 212 municipios poco a poco la efervescencia del proceso electoral se va incrementando, mujeres y hombres caminan sus comunidades, hacen eventos festivos, organizan grupos sociales, regalan juguetes, despensas e incluso dinero a diestra y siniestra y presumen de una gran aceptación social, hombres y mujeres que hoy y mañana – aún más – harán gala de humildad, sencillez y de cercanía con el pueblo, esas características que cuando tuvieron el poder –algunos de ellos– no se les vio por ningún lado, sin embargo, hoy son lo que no fueron ayer, ¿acaso los ciudadanos no tienen alguna responsabilidad al elegir?

Ex diputados locales, federales, alcaldes y funcionarios públicos de gobiernos anteriores hoy –juegan– al concurso de Miss Simpatía, ¿quién tiene la mejor sonrisa? ¿quién cuenta más chistes? ¿Quién es el más espléndido y desprendido? ¿quién abraza a más niños y abuelitas? ¿acaso creen que a los ciudadanos ya se les olvidó cuando los buscaron en sus oficinas y nunca los encontraron? ¿cuando les hicieron alguna llamada y nunca les respondieron? ¿cuando les hicieron alguna petición y no tuvieron respuesta alguna –no necesariamente alguna respuesta positiva– pero hoy son pura sencillez? ¿en serio el pueblo es sabio?

Dicen que las elecciones municipales son las de mayor participación social, por lo regular todos conocen a todos, la ciudadanía conoce el trabajo social que han llevado a cabo actores políticos que con cargo y sin cargo han mantenido contacto con todos los grupos sociales, hombres y mujeres que sin importar la época del año tocan puertas de las dependencias de gobierno, gestionan apoyos e invierten de sus propios recursos económicos para impulsar el desarrollo de sus comunidades y por lo consiguiente son candidatos naturales a integrar las planillas para integrar los cabildos, en un municipio todos se conocen y algunos oportunistas creen que sorprenden a los ciudadanos pero los más sorprendidos serán ellos.

Veracruz está enojado, pero no con alguien en particular, Veracruz está decepcionado porque –sin importar el color del partido– la verdadera transformación no ha llegado a los 212 municipios del Estado y tuvo que haber llegado desde hace muchos años, ¿a quién culpar por el mal estado de las carreteras? ¿A quién señalar por el desabasto de medicinas y la falta de médicos especialistas? ¿A quién reclamar por “presuntos” actos de corrupción de gobiernos de todos colores y sabores? ¿Acaso solo cuando llega al poder un partido distinto al que se va existe la posibilidad de que haya justicia? ¿Qué se requiere para realmente poner a Veracruz de moda?

Una vez más –invito a las nuevas generaciones de jóvenes– Veracruz debe ser heroico, una vez más Veracruz debe dar una muestra de participación ciudadana y no mantenerse al margen de este proceso electoral municipal, más allá de preferencias partidistas, de ideologías políticas, de los aspirantes que apoyen, del grupo social al que se pertenezca, todos debemos ser parte de las soluciones que exige Veracruz, reflexionar, analizar, proponer, escuchar, participar, organizar y sobre todo, poner en el centro del debate, las principales necesidades y demandas de la población y de los grupos más vulnerables.

Eliminar del vocabulario la frase: “no me gusta la política” “todos son iguales” “la política es sucia” y tener presente que los gobernantes son un reflejo de nuestra sociedad ¿a poco son extraterrestres los que han gobernado? dicen que la verdad no peca pero incómoda pero ante una apatía ciudadana el gobernante es feliz, ¿quién lo cuestiona? ¿Quién le señala sus irregularidades financieras? ¿Quién le reclama sus promesas incumplidas? hagamos del proceso electoral municipal el de mayor participación ciudadana en la historia de Veracruz, ¿quién dice que no se puede?

La mayoría de los analistas políticos consideran que Morena va en caballo de hacienda rumbo a los palacios municipales, la mayoría considera que el partido Verde y el partido del Trabajo serán sus fieles escoltas, pero estos partidos seguramente traen sus propias estrategias y por lo consiguiente sus propios candidatos, muchos piensan que ponga a quien ponga –el partido en el poder– los postulados pasarán en automático a ocupar la silla municipal, ¿acaso sin importar sus antecedentes personales y políticos?

Si algo dañó la imagen del PRI ayer fue confiar en su maquinaria electoral y estructura territorial, la soberbia no es muy buena consejera, el PRI presentó impresentables y los hizo ganar, a pesar de sus malos gobiernos las y los alcaldes cobraban sus quincenas y el partido pagaba los costos políticos, ¿acaso ya se olvidó esa mala receta?

Morena tiene un gran poder y eso no está a discusión, morena cuenta con una gran aceptación social y eso lo sabe la oposición, sin embargo, también es cierto que en algunos municipios donde ha sido gobierno morena no han dejado el mejor recuerdo, que nadie minimice la memoria ciudadana por que puede haber sorpresas, lo cierto es que morena al tener mucho poder también tiene mucha responsabilidad al postular mujeres y hombres que no solo presuman la marca sino también su prestigio personal y su capital político para sumar más, es cierto, ten cuidado a quien llevas al poder.

P.D.- Con el ánimo de que con buenas políticas públicas y participación social realmente Veracruz se ponga de moda… Escribiré otro día.