…del pastel de nadie.

1. Es obvio que Fernando el Pulpo Remes Garza, que fue tan buen beisbolista como pésimo presidente municipal, quería dejar a su hijito Roger Remes Rosado en la silla que tan mal ocupó los últimos casi cuatro años, con el objetivo seguramente de que le cuidara las espaldas y tapara todas las tropelías financieras y legales que cometió en su reinado.

Y se vale poner “reinado” porque el Pulpo se sintió bendecido por Dios mismo cuando el Patriarca AMLO, su amigo y compañero de afinidades beisbolísticas, lo mandó directo y sin tocar baranda a la alcaldía de su tierra natal, la por esa razón sufrida Poza Rica.

Pensó seguramente el gran shortstop (o “parador en corto” para los puristas, o “shior” para la raza) que más que un puesto le había dado el Presidente una patente de corso para que se sirviera a gusto de los dineros del municipio petrolero. Y es que si fue excepcional en el diamante para cachar todas las rolas que le mandaban los bateadores, fue más perfecto para cachar los moches y los desvíos que salieron y probablemente siguen saliendo del erario municipal.

2. Otro que pensó que se ganaría la corona del pastel fue José Luis Lima Franco, el Secretario de Finanzas del gobernador Cuitláhuac García Jiménez, que hizo una jugada de colmillo genial (según pensaban él y sus coequiperos cuitlahuistas, tan limitados ellos) cuando le fue a decir a la Gobernadora Electa (¡a la poderosa funcionaria!) que mejor no le iba a aceptar seguir ocupando el puesto que ella le había pedido que conservara, y que mejor se iba a su tierra natal a trabajar para conseguir la presidencia municipal.

Es de kínder para cualquier político a la usanza saber que al poderoso no se le puede decir que no, pero Pepe Lima el Ingenuo pensó que era de alguna manera él era un personaje influyente y que la ingeniera Nahle se iba a doblar ante su capricho.

¡Qué barbaridad!, como dice el amigo Omar Zúñiga.

Pues se fue Pepillo Limilla con algunos centavos que le sobraron de la Secretaría de Finanzas y anduvo los primeros meses de este año haciendo la luchita a los simpatizantes de Morena y a los votantes pozarricenses. Y como era de esperarse, los señores del nuevo Gobierno le hicieron su cultivo a la yucateca y lo dejaron pensar que estaba avanzado en su objetivo de conseguir la silla y el fuero. Sobre todo el fuero, para que lo defendiera de las investigaciones y las múltiples observaciones sobre el manejo del presupuesto estatal en el pasado sexenio.

Para que se sepa quién manda en México y quién en Veracruz, fue destapada como la candidata la diputada local Janeth Adanely Rodríguez Rodríguez, con el beneplácito del profesor Esteban Bautista, líder de la Jucopo en la actual Legislatura jarocha.

Apenas se dio a conocer el nombre de la agraciada y tal vez por eso no hay noticia de José Luis Lima Franco, pero si no es tan torpe, seguramente ya debe haber puesto los pies en polvorosa.

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