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Ciudad de México/ La presidenta Claudia Sheinbaum desestimó la propuesta del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, de renombrar el Golfo de México como “Golfo de América”. Durante su conferencia matutina, Sheinbaum respondió con ironía y datos históricos, sugiriendo que, si se va a cambiar el nombre, mejor se denomine “América Mexicana”, en alusión a un término usado en el siglo XIX.
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La mandataria mostró un mapa de 1607 editado por la Compañía de Indias de Ámsterdam, que ya identificaba la región como “Golfo mexicano”. Asimismo, recordó que la Constitución de Apatzingán de 1814 se refería a los territorios que actualmente forman parte de Estados Unidos como “América Mexicana”.
“Obviamente, el Golfo de México es reconocido como tal por Naciones Unidas, pero ¿por qué no llamarle América Mexicana? Desde 1607 ya usaban ese nombre. La Constitución de Apatzingán también lo recoge, entonces vamos a reivindicar nuestra historia”, expresó.
Para sustentar su posición, invitó a José Alfonso Suárez del Real, asesor político de la presidencia, quien detalló que el nombre “Golfo de México” es reconocido desde antes de la consolidación de Estados Unidos y destacó el impacto histórico de los territorios mexicanos que contribuyeron al desarrollo del continente.
CRÍTICAS A LAS DECLARACIONES SOBRE EL NARCOTRÁFICO
Además de la polémica del Golfo, Sheinbaum respondió a las críticas de Trump, quien afirmó que “México está esencialmente gobernado por cárteles” y lo calificó como un “lugar muy peligroso”.
La mandataria rechazó estas declaraciones, señalando que el republicano está “malinformado” y parece tener una visión atrasada del país. “Tal vez le informaron que en México todavía gobernaban Felipe Calderón y Genaro García Luna, pero no, en México gobierna el pueblo”, dijo Sheinbaum, en referencia al expresidente y su exsecretario de Seguridad, implicado en actos de corrupción y narcotráfico.
Sheinbaum subrayó que el país enfrenta desafíos, pero no aceptará comentarios que busquen desacreditar la soberanía mexicana o minimizar su legado histórico. “Somos un país con una rica historia y una ciudadanía comprometida, y no permitiremos que opiniones mal informadas nos definan”, concluyó.
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