Washington, D.C./ El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmó este sábado que los barcos estadounidenses, tanto militares como comerciales, deberían poder transitar gratuitamente por los canales de Panamá y Suez. El mandatario hizo este pronunciamiento a través de su red social Truth Social, donde además solicitó al secretario de Estado, Marco Rubio, que atienda "de inmediato" esta situación.

“Los barcos estadounidenses, tanto militares como comerciales, deberían poder navegar gratuitamente por los canales de Panamá y Suez. ¡Estos canales no existirían sin Estados Unidos de América!”, escribió Trump en un mensaje lleno de exclamaciones.

La declaración se suma a la postura que Trump ha sostenido en los últimos meses sobre el Canal de Panamá, donde ha reiterado su intención de que EE.UU. recupere el control de esta vía estratégica. Según el líder republicano, la presencia de un operador hongkonés en dos de los cinco puertos cercanos al canal representa un riesgo de "control chino" sobre la infraestructura, construida por Estados Unidos a comienzos del siglo XX y administrada hasta su traspaso a Panamá en 1999.

El reclamo de Trump se produce a pesar de que, el pasado 8 de abril, el secretario de Defensa estadounidense, Pete Hegseth, reconoció oficialmente la “soberanía irrenunciable” de Panamá sobre el canal y sus áreas adyacentes en una declaración conjunta con el gobierno panameño.

En ese mismo acuerdo, ambas naciones se comprometieron a trabajar en un mecanismo que permita compensar los pagos de peajes y cargos que actualmente realizan los buques de guerra estadounidenses al cruzar el paso navegable, una de las quejas recurrentes del mandatario republicano.

En paralelo, a mediados de marzo, la Comisión Federal Marítima de Estados Unidos (FMC) inició investigaciones sobre siete puntos clave del comercio marítimo internacional, incluyendo los canales de Panamá y Suez, en busca de posibles “condiciones desfavorables” para el transporte marítimo estadounidense.

La exigencia de Trump marca un nuevo capítulo en la estrategia de su administración de reforzar la influencia estadounidense en corredores estratégicos de comercio global, en medio de crecientes tensiones geopolíticas.